La implementación del compliance legal de la empresa salvaguarda la ética y la legalidad en todas las facetas de las operaciones empresariales. La coordinación de estos enfoques permite a la empresa construir una cultura de cumplimiento arraigada en la ética y la responsabilidad, lo que contribuye a su sostenibilidad y éxito a largo plazo. 

Modelos específicos de cumplimiento 

Estos modelos son esenciales para garantizar que las empresas cumplan con los requisitos normativos específicos que afectan directamente a su operación: 

• Compliance penal. Este enfoque se centra en garantizar que la empresa cumpla con las normativas legales en el ámbito penal.
• Compliance corporativo. Dirigido a garantizar el cumplimiento de normas internas y externas que afectan la estructura y operaciones corporativas.  
• Compliance medioambiental. Este modelo se enfoca en el cumplimiento de regulaciones ambientales y prácticas sostenibles. 
• Compliance de prevención de riesgos laborales. Centrado en la seguridad y bienestar de los empleados, este modelo se esfuerza por garantizar que la empresa cumpla con las regulaciones destinadas a prevenir accidentes y proteger la salud de los trabajadores. 
• Compliance anticorrupción. Diseñado para prevenir y abordar prácticas corruptas dentro de la organización, este modelo es esencial para empresas que operan en entornos propensos a la corrupción. 
• Compliance de salud pública. Se ocupa de cumplir con normativas relacionadas con la salud y seguridad públicas.  
• Compliance fiscal y tributario. Asegura el cumplimiento de las obligaciones fiscales y tributarias. Este modelo aborda la gestión adecuada de los impuestos y la presentación de informes conforme a la normativa fiscal.